En la oportunidad se realizó además una mantención del sistema, el cual incorpora sensores que miden nutrientes, clorofila, oxígeno, turbidez, salinidad, temperatura, pH, corrientes marinas y variables superficiales como co2...
En la oportunidad se realizó además una mantención del sistema, el cual incorpora sensores que miden nutrientes, clorofila, oxígeno, turbidez, salinidad, temperatura, pH, corrientes marinas y variables superficiales como co2 atmosférico, velocidad del viento, radiación solar, presión barométrica y temperatura ambiental, entre otras variables, continuando así con su contribución a la investigación oceanográfica y ambiental.
El Observatorio Marítimo Reloncaví (OMARE) del Centro i~mar de la Universidad de Los Lagos viene desde hace años recolectando datos oceanográficos y meteorológicos del Seno de Reloncaví, precisamente teniendo como hito fundacional la instalación de una boya oceanográfica en las cercanías de la Isla Huar en 2017.
De esta manera se ha posicionado como una plataforma que facilita la investigación -tanto de la Universidad de Los Lagos, como otras casas de estudio e instituciones públicas y privadas- para la comprensión del ecosistema del Seno Reloncaví.
Y es que a partir de los datos obtenidos por la boya oceanográfica, se han realizado estudios que abarcan temáticas como el comportamiento actual del clima en la Patagonia, Formación de Algas Marinas (FAN), niveles de coliformes fecales en la costa, entre otras.
