Se trata de un proyecto Fondecyt liderado por el Dr. Javier Parada Silva, académico del ICYTAL (Mundo Acuícola). Chile se está transformando en un país cada día más longevo y...
Se trata de un proyecto Fondecyt liderado por el Dr. Javier Parada Silva, académico del ICYTAL (Mundo Acuícola).
Chile se está transformando en un país cada día más longevo y eso lo confirman las últimas cifras del Censo abreviado de 2017, donde el número de adultos mayores llegó a los 2 millones 800 mil, correspondiendo a un 16,2% del total de la población.
Según la Organización Panamericana de la Salud la mortalidad en el grupo de adultos mayores e nuestro país es de 65 a 79 años de edad asciende a 28,7 por 1.000 habitantes, con 28.247 muertes que equivalen a 33,8% del total. Las principales causas de muerte por 100.000 habitantes son: enfermedades del sistema circulatorio (916,3); tumores (866,4); enfermedades del sistema respiratorio (243,2) y enfermedades del sistema digestivo (238,0).
En ese contexto cobra relevancia el proyecto Fondecyt Regular “Extracción asistida por ultrasonido para desarrollar un ingrediente con propiedades anti enfermedades relacionadas con la edad, a partir del alga Durvillaea Antártica (cochayuyo)”, que acaba de adjudicarse el Dr. Javier Parada S., académico del Instituto de Ciencias de los Alimentos (ICYTAL) de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Austral de Chile. Esta iniciativa tiene 4 años de duración y la Dra. Paz Robert de la Universidad de Chile es la co-investigadora.
El objetivo principal del proyecto – explica el Profesor Parada- es determinar las propiedades saludables del extracto hidroalcohólico de cochayuyo (Durvillaea Antártica) en relación a su actividad biológica anti enfermedades relacionadas con la edad, estudiando también su estabilidad bajo diferentes condiciones de uso, lo que será la base de futuros desarrollos de alimentos funcionales.
Los extractos hidroalcohólicos resultan de someter un material al cual se le quiere extraer cierto grupo de compuestos bioactivos de interés; se usa una solución de etanol-agua en fracciones variables (solución hidroalcohólica), y el resultado es considerado un extracto natural, sin el uso de solventes orgánicos.
En resumen, “este proyecto ahondará en las posibles propiedades saludables del cochayuyo, y se deriva del conocimiento generado en un proyecto FONDECYT anterior. Varias propiedades serán estudiadas in vitro, así como la estabilidad de los extractos bajo condiciones de uso”.
La idea es entonces generar un “ingrediente” que pueda añadirse a alimentos que se elaboran para ser consumidos por la población adulta, que ayude a evitar o retardar la aparición de enfermedades y sus complicaciones, sostiene el Profesor Parada, actual Director de la Escuela de Ingeniería en Alimentos de la UACh.
Agrega que hasta el momento- como se dijo en proyectos anteriores- se ha comprobado que el cochayuyo es el que presenta mejor potencial, no solo en cuanto a los compuestos antioxidantes que posee, sino también el perfil de inhibición parece ser el más saludable, al inhibir en grados diferentes a las dos enzimas principales implicadas en la digestión del almidón que causan diabetes.
