Hoy, a las 19.00 horas, en La Vinoteca de Puerto Varas, comenzará la cuarta edición del ya consolidado ciclo de charlas, organizado por Skretting Chile y auspiciado por DSM, Hendrix Genetics y ScaleAQ.

Mundo Acuícola conversó con Denisse Vega y Karen Rodríguez, socias y directoras de la destacada firma de comunicación estratégica Tironi, quienes hoy realizarán la charla «Narrativas y Oportunidades para conectar con los consumidores del futuro», dando inicio al exitoso ciclo organizado por Skretting Chile.

Ayer comenzó la cuarta edición del ya consolidado ciclo de charlas F.I.S.H Great Talks, organizado por Skretting Chile y auspiciado por DSM, Hendrix Genetics y ScaleAQ.

Esta primera charla abordó las «Narrativas y Oportunidades para conectar con los consumidores del futuro», a cargo de las expertas en retail y consumo Denisse Vega y Karen Rodríguez, socias y directoras de la destacada firma de comunicación estratégica Tironi.

Ambas expusieron sobre las conductas del llamado ‘nuevo consumidor’, las tendencias sociales y el cómo dirigirse a diferentes públicos, las nuevas narrativas de marca, el posicionamiento y las estrategias de comunicación a las que deben orientarse hoy las empresas productivas.

1. ¿Cómo ha incidido la Pandemia y el actual escenario internacional en las tendencias de consumo de salmón?

La pandemia ha significado un antes y un después para todos los sectores de la sociedad. Sin duda, la industria de la alimentación en general, y el salmón en particular, no han estado ajeno a ello, siendo desafiados a adaptarse rápidamente a las nuevas condiciones y estilos de vida de los consumidores, manteniendo la continuidad operacional. Lo anterior, ha permitido no dejar de alimentar a millones de personas alrededor del planeta.

Desde el punto de vista del consumidor, las restricciones de movilidad vividas en las fases más agudas de la crisis sanitaria generaron cambios importantes en las ocasiones de consumo. En el caso del salmón, que tiene un importante consumo fuera del hogar, ingresó al ámbito de la vida familiar, lo que tuvo un impacto en la venta retail del producto y en los hábitos de preparación y alimentación de este producto.

Esto sin duda es una buena noticia, debido a que incide positivamente en la familiaridad con el producto y en la relevancia que adquiere en la dieta cotidiana. Pero todas las oportunidades traen desafíos. En este caso, se hace crucial la disponibilidad del producto en los distintos canales de venta, sobre todo en el canal online, que afianzó su posición dentro de la pandemia y que obliga a reforzar la presencia del salmón en el e-commerce. La compra on-line es una transacción que se busca hacer sin intermediarios, lo que impulsa a los productores a diseñar una experiencia online capaz de transmitir los atributos del producto, así como también al desarrollo de formatos que se adecuen a las diversas necesidades de los consumidores en el hogar.

La pandemia también reforzó la importancia de la salud, por lo tanto junto a los atributos como el sabor y la versatilidad de las preparaciones, es muy valioso comunicar calidad, seguridad y los beneficios de salud del producto.

Por último, a las consecuencias del COVID, se suma el aumento en el costo de la vida. La conveniencia se vuelve central dentro de los factores que inclinan la balanza hacia uno u otro producto, por lo que la comunicación de precios es hoy más relevante que antes. El salmón es una proteína necesaria pero que podría, en ciertos segmentos de la población, tener la percepción de ser un producto caro que no cubre las necesidades de un grupo familiar de varios integrantes. Para esto la informar de manera activa en el punto de venta y en la publicidad es clave para desmontar creencias erróneas sobre el producto.

2. ¿A qué características de los productos están prestando atención los nuevos consumidores?

Se trata de una ecuación que se complejiza.  En la categoría de alimentos, está la aspiración de llevar a la mesa productos ricos y saludables, pero que no impliquen preparaciones complejas ni lentas, y que sean aceptados por todos los integrantes del grupo familiar.

Otro elemento relevante es que los chilenos y chilenas están más dispuestos a la “lectura de etiquetas” como confirmación de la calidad y origen de los productos. Los sellos han sido una política pública exitosa y un espacio de aprendizaje que ha permitido tomar decisiones informadas. Pero no sólo se trata de información nutricional, a los consumidores cada vez les interesa más la cadena completa, es decir cómo y bajo qué estándares sociales, ambientales y laborales fueron producidos.

Sin embargo, en tiempos de restricciones económicas, como el que estamos viviendo en Chile y el mundo, es evidente que el precio toma un lugar muy preponderante. En este sentido, muchos consumidores se ven forzados a cambiar marcas, buscar nuevos formatos e incluso eliminar productos de consumo habitual porque la billetera no lo permite. Las familias viven esto con costos emocionales, la compra se vuelve un acto más complejo y el cambio de hábitos se experimenta como una pérdida. Las marcas deben estar atentas y activas ya que también serán evaluadas por lo que hicieron por sus clientes durante la crisis económica.

3. ¿Cuáles son las medidas que debería potenciar la industria del salmón chileno para estar en sintonía con las nuevas tendencias de consumo de alimentos?

Las podríamos resumir en cuatro: En primer lugar, desarrollar marcas fuertes de cara a sus consumidores. Las marcas son vehículos de comunicación que facilitan la transmisión de mensajes y atributos. El salmón tiene un potencial de crecimiento enorme, sobre todo en nuevas ocasiones de consumo, pero requiere un esfuerzo comunicacional que le permita tener una posición ventajosa en la mente de los consumidores, es decir ganar en recordación y reconocimiento.

Segundo, estar disponibles. Entendemos que nuestro salmón es un producto de exportación, pero para conquistar a los consumidores debe estar disponible en diversos canales de distribución online y offline, sólo así se crean hábitos y se construye cercanía. Tercero, hay un trabajo reputacional que hacer, y donde las nuevas generaciones son y serán implacables. Por eso, es clave asegurar prácticas productivas amigables con el medioambiente porque estas se consolidan día a día como un factor de preferencia de la mayor importancia.  Y por último, la industria debe acercarse a los chilenos y chilenas para formar parte de nuestra identidad local y parte de nuestra imagen país. Avanzar a ser una industria estimada localmente, es un activo en el mercado extranjero.