Dirigente de FESIP, organización sindical que reúne a más de 2.000 trabajadores/as, espera que no se elimine el fraccionamiento en la próxima discusión de una nueva Ley.
El incremento de la cuota chilena de captura de jurel en el Pacífico Sur a 716.758 toneladas para este 2023, es una noticia que tendrá efectos muy positivos en la vida laboral de miles de trabajadores y trabajadoras de la industria que procesan esta proteína del mar.
El aumento decretado por la Organización Regional de Pesca del Pacífico Sur (ORP) es una excelente forma de demostrar que la actual ley que fracciona en cuotas el recurso pesquero a las empresas, ha permitido recuperar el recurso “y a nosotros como trabajadores y trabajadoras, nos ha dado estabilidad”, dice Juana Silva, presidenta de la FESIP, Federación de Sindicatos de Trabajadores de La Industria Pesquera Región del Biobío, que reúne a más de 2.000 trabajadores de 8 sindicatos de distintas compañías del borde costero de la región.
“Esta noticia es muy positiva. Nos permite proyectar nuestra estabilidad laboral en el tiempo y negociar con la industria con mayor seguridad, ya que las plantas de congelados y conservas, como de harina y aceite de pescado, tendrán más producción”, dijo.
La dirigente sindical comentó también que este escenario abre espacios para que los empresarios inviertan en plantas y con ello aumenten el empleo. “Para quienes vivimos en la región del Biobío, esta decisión de la ORP nos otorga tranquilidad y proyección en el trabajo, siempre y cuando en la futura discusión de la Ley de Pesca se decida mantener la distribución o fraccionamiento del recurso en cuotas tal como ha sido hasta ahora. Ello porque la actual ley ha permitido la recuperación biológica del jurel. Hago un llamado a los parlamentarios a que revisen el impacto positivo que ha tenido la actual ley y lo mantengan en la próxima discusión legal”.
