La empresa acusa daño económico, pérdida de empleos y arbitrariedad en las restricciones que desde 2022 le impiden sembrar en su centro Huillines 3 ubicado en el Fiordo Cupquelán.
Superintendencia de Medioambiente
Cooke pide anular medida de la SMA, acusando ilegalidad, falta de sustento técnico y pérdidas por más de US$30 millones.
