El gremio mitilicultor hace un llamado a informarse sobre los delitos que afectan a la propiedad privada, a denunciar malas prácticas y a devolver los elementos hallados o habidos informalmente.
El hurto y/o robo de elementos de flotación, se ha convertido en una situación recurrente desde hace ya varios años. Esto se genera debido a que, en su mayoría, los actos no son denunciados por las víctimas, pues sienten que no reciben el apoyo necesario.
La Asociación Gremial de Mitilicultores de Chile, AmiChile, hizo un llamado a denunciar malas prácticas que involucran, sobre todo, al hurto y/o robo de boyas, lo que desencadena en la venta ilegal de este material.
Es por eso que desde AmiChile: “Hacemos un llamado a la comunidad en general a denunciar estas malas prácticas cuando sean testigos o tomen conocimiento de ello y a los mismos mitilicultores a informar dichos ilícitos cuando sean víctimas. Con esto, buscamos ordenarnos y regularizar estas situaciones, con el fin de que no se vea perjudicado el sector por falta de probidad y ética respecto al tema”, señaló Yohana González, Gerente General de AmiChile.
Y añadió: “Es necesario que los mitilicultores marquen sus boyas y que las mantengan bien resguardadas, para evitar estos escenarios, pero también para impedir que este material se convierta en un residuo que esté presente en el borde costero”.
Cabe señalar que, si alguna persona adquiere de forma irregular elementos sin denominación de origen, arriesga ser condenado como autor del delito de receptación, lo que implica que puede sufrir la pena de presidio menor en cualquiera de sus grados y multa de 5 a 100 UTM.
Además, si alguien ve que esto ocurre debe dar cuenta a las autoridades competentes, es decir, a la Armada de Chile. Para ello, debe acudir a la Capitanía de Puerto del lugar en donde haya ocurrido el ilícito y hacer la denuncia correspondiente.
