
Estudio liderado por la Universidad de Stirling revela nueva población celular que podría mejorar la salud y supervivencia del salmón del Atlántico en centros de cultivo.
Un estudio internacional encabezado por la Universidad de Stirling ha revelado la existencia de células madre adultas en la piel del salmón del Atlántico, con funciones clave en la reparación de tejidos y la regeneración de estructuras profundas. El hallazgo, publicado en la revista BMC Biology, podría abrir nuevas vías para abordar problemas sanitarios persistentes en la acuicultura, especialmente relacionados con la integridad de tejidos de barrera como la piel y las branquias.
El trabajo fue liderado por la doctora Rose Ruiz Daniels, del Instituto de Acuicultura de dicha universidad, y se titula Transcriptomic Characterization of Transitioning Cell Types in the Skin of Atlantic Salmon. En él se describe una población previamente desconocida de células estromales mesenquimales (MSC, por sus siglas en inglés), similares a fibroblastos, activas durante la fase de remodelación del proceso de cicatrización.
“Encontramos MSC tanto en el sitio de la herida como en piel intacta, lo que sugiere que estas células madre adultas son una parte estable y funcional de la piel del salmón, probablemente implicadas en el mantenimiento de sus propiedades estructurales y de barrera”, explicó la doctora Ruiz Daniels.
Mediante el uso de tecnologías de secuenciación de ARN de núcleos individuales y transcriptómica espacial, el equipo logró perfilar la actividad de las células cutáneas a lo largo del proceso de sanación. En esa etapa, las MSC mostraron mayor actividad y señales de diferenciación hacia diversos tipos de tejidos.
“Estas células se vuelven más activas a nivel transcripcional durante la etapa de remodelación y muestran señales de diferenciarse en múltiples tipos de tejidos, incluyendo hueso y grasa”, señaló la investigadora.
Proyecciones
El hallazgo también abre nuevas posibilidades sobre cómo se interrelacionan distintos procesos de regeneración en los peces. “Esto sugiere una capacidad regenerativa más amplia en la piel de los peces de lo que se creía, posiblemente conectando los procesos de reparación cutánea con los de tejidos más profundos como músculos, escamas y tejido conectivo”, agregó la científica.
Aunque células similares están bien descritas en mamíferos, en peces teleósteos como el salmón podrían conservar una mayor pluripotencia, lo que ampliaría su capacidad para desempeñar múltiples funciones regenerativas. El estudio también mapea los nichos espaciales de distintas subpoblaciones de MSC, abriendo el camino a futuras investigaciones orientadas a mejorar la reparación de tejidos y la salud general de los peces.
“Estos hallazgos podrían tener implicancias de gran alcance para la acuicultura. La salud de los tejidos de barrera, especialmente piel y branquias, representa un desafío mayor en el cultivo de salmón del Atlántico y es una de las principales causas de mortalidad en centros de mar”, indicó Ruiz Daniels.
Cambio climático
El estudio además vincula estos desafíos con el impacto creciente del cambio climático sobre la actividad acuícola: “Existe una necesidad urgente de enfoques biotecnológicos innovadores para mejorar la salud de los peces, considerando que la acuicultura también enfrenta desafíos crecientes derivados del cambio climático, como mayores riesgos sanitarios e incertidumbres térmicas”.
En ese contexto, los investigadores aspiran a desarrollar soluciones concretas a partir del nuevo conocimiento celular generado: “Al comprender cómo las células cutáneas remodelan y cicatrizan tejidos, esperamos desarrollar nuevas estrategias que fortalezcan la integridad tisular y reduzcan las heridas que no sanan en tejidos de barrera”, concluyó.
La investigación contó con la colaboración del Instituto Roslin, Nofima y la Universidad de la Isla del Príncipe Eduardo. También participaron como coautores Sarah Salisbury, Diego Robledo, Lene Sveen, Paula Rodríguez Villamayor, Nick Robinson, Ross Houston, James Bron, Sean Monaghan, Mark Fast, Marianne Vaadal, Aleksei Krasnov, Torstein Tengs, Carolina Peñaloza Navarro y Maeve Ballantyne.