La Base de la Vida Acuática: Oxigenación

El oxígeno es un factor crítico en la acuicultura, ya que su disponibilidad determina la salud, crecimiento y rendimiento de los peces. Su concentración depende de variables como temperatura, salinidad y altitud, por lo que mantener niveles adecuados en pisciculturas y centros de engorda es esencial. Los salmones, por ejemplo, requieren entre 8 y 9 mg/L para un óptimo desempeño. Cuando el oxígeno disminuye, la ingesta de alimento y el metabolismo se ven comprometidos, generando pérdidas productivas. Ante este desafío, la industria ha desarrollado tecnologías que permiten optimizar la oxigenación, desde los clásicos conos Speece hasta difusores avanzados y sistemas de nanoburbujas. A la vez, la elección de fuentes energéticas limpias para generar oxígeno puede reducir significativamente la huella de carbono, un aspecto clave considerando que la salmonicultura ya presenta menores emisiones que otras proteínas animales.

Más allá del costo, el uso de oxígeno representa una inversión estratégica frente a fenómenos como las floraciones algales nocivas y la hipoxia. En este contexto, innovaciones como el difusor VitaDi™ de Imenco Aqua —desarrollado en Chile— han elevado la eficiencia de transferencia de oxígeno sobre el 90% sin aumentar el consumo energético, contribuyendo a una producción más estable y sostenible. Estos avances demuestran que la integración de nuevas tecnologías y energías renovables en la gestión del oxígeno no solo mejora la productividad, sino que también fortalece el compromiso ambiental de la industria acuícola.

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